Qué hacer si tu gato vomita espuma blanca

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Indigestión
Bolas de pelo
Enfermedades leves
Enfermedades más graves
Parásitos

A veces puede parecer que tu gato vomita casi a voluntad; los vómitos felinos pueden ser algo demasiado frecuente. La mayoría de las veces, tu gato vomita una bola de pelo o vomita porque ha comido demasiado deprisa. Pero si tu gato vomita espuma blanca, suele significar que ha vomitado con el estómago vacío. Un solo episodio de vómitos no suele ser grave, pero si tu gato vomita con frecuencia, es señal de que algo va mal.

Los motivos habituales de que los gatos vomiten espuma son la inflamación o irritación del aparato digestivo, la ingestión de un cuerpo extraño como una cuerda, parásitos internos, infecciones bacterianas o víricas, enfermedades sistémicas como problemas renales o tiroideos, o una intolerancia o alergia alimentaria.

A menudo los gatos parecen estar perfectamente después de un episodio de vómitos, pero si tu gato muestra signos de enfermedad, como letargo, rechazo a comer, diarrea o comportamiento “apagado”, o si vomita con frecuencia, es hora de llamar al veterinario. El veterinario puede ayudarte a averiguar qué le pasa a tu gato y cómo aliviarlo.

He aquí algunas razones frecuentes por las que tu gato vomita espuma blanca, así como formas de ayudarle a sentirse mejor.

Indigestión

Al igual que las personas, el estómago del gato produce diversos jugos gástricos y ácido clorhídrico para digerir la comida. Sin embargo, si un gato se salta una comida por algún motivo, o si no se le da de comer a tiempo, esa acumulación de jugos y ácido puede irritar el estómago y hacer que tu gato vomite^. 1 Los gatos con indigestión pueden vomitar espuma amarilla además de espuma blanca. Si tú y tu veterinario sospecháis que los vómitos de tu gato se deben a una indigestión, el veterinario puede sugerir que le des comidas pequeñas y frecuentes a la misma hora a lo largo del día para aliviar la acumulación de ácido estomacal.

Bolas de pelo

Todos los gatos se lamen para acicalarse e inevitablemente ingieren pelo al hacerlo. A veces pueden expulsar el pelo con las heces, pero a veces el pelo se acumula y no puede expulsarse. Cuando esto ocurre, el pelo tiene que ir a alguna parte, y tu gato lo vomitará^.2 Si tu gato vomita espuma blanca pero aún no tiene pelo, puede ser el precursor de una bola de pelo. Para prevenir las bolas de pelo existen suplementos dietéticos de venta libre, en forma masticable o de gel. Adoptar un programa regular de cepillado también puede ayudar a eliminar el pelo suelto del pelaje de tu gato, que de otro modo podría ingerir al acicalarse.

Cómo hacer que un gato vomite

Gastritis

Si tu gato es de los que se meten donde no deben, es posible que se haya irritado el estómago con algo que ha comido^.3 Cuando esto ocurre, es posible que, además de vomitar sangre y/o bilis, veas que vomita espuma blanca. Tu gato también puede mostrar una disminución del apetito, una actitud depresiva, letargo o deshidratación. Tu veterinario sabrá qué hacer si tu gato vomita a causa de una gastritis.

Síndrome del intestino irritable (SII)

El síndrome del intestino irritable, a veces llamado enfermedad inflamatoria intestinal, es una de las causas más frecuentes de vómitos en los gatos^.4 Los gatos que padecen SII también pueden sufrir diarrea y/o descompensación crónica. Si tu veterinario sospecha un SII, querrá hacer pruebas de laboratorio para confirmar el diagnóstico y, a continuación, establecer un plan de tratamiento para aliviar los síntomas de tu gato.

Pancreatitis

Los gatos pueden sufrir pancreatitis, igual que los perros y las personas. Puede ser aguda o crónica. También puede concurrir con otras enfermedades, como enfermedades gastrointestinales, hepáticas y/o diabetes. Además de los vómitos, los signos de los gatos que padecen pancreatitis pueden incluir letargo, pérdida de apetito, deshidratación, pérdida de peso, baja temperatura corporal, ictericia, fiebre y dolor abdominal^.5 Si la pancreatitis es la causa de los vómitos de tu gato, es probable que tu veterinario quiera empezar a tratarlo con fluidoterapia y medicamentos.

Insuficiencia hepática

Los gatos que padecen una enfermedad hepática pueden mostrar diversos síntomas inespecíficos, como vómitos, falta de apetito o pérdida de peso, así como síntomas más graves como ictericia, o coloración amarillenta de la piel y la esclerótica (blanco de los ojos)^. 6 La enfermedad hepática no es curable, pero los síntomas pueden controlarse. Tu veterinario creará un plan de tratamiento para que tu gato empiece a sentirse mejor.

Diabetes

Los principales síntomas de la diabetes en los gatos, al igual que en los perros y las personas, son el aumento de la bebida y la micción, así como la pérdida de peso y la deshidratación^.7 Si tu gato muestra repentinamente un aumento de la bebida y la micción, ya sea en combinación con alguno de los otros síntomas enumerados o sin ellos, no tardes en pedir cita para que lo vea tu veterinario. Según la gravedad de la diabetes de tu gato, es posible que el veterinario quiera iniciar un tratamiento con insulina o un simple cambio de dieta.

Insuficiencia renal

La insuficiencia renal crónica (IRC) es una enfermedad muy frecuente en los gatos mayores. Otros síntomas de la ERC son un aumento considerable de la bebida, un cambio en la producción de orina, pérdida de apetito, deshidratación, estado de ánimo apagado, escaso pelaje y debilidad^.8 Al igual que la enfermedad hepática, la enfermedad renal no puede curarse, pero los síntomas pueden controlarse. Si tu gato senior empieza a mostrar algún signo urinario, llévalo al veterinario. Si le diagnostican ERC, podrá hablarte de los cuidados de apoyo, tanto en casa como en el hospital, para ayudar a tu gato a sobrellevar su insuficiencia renal.

Hipertiroidismo

Una tiroides hiperactiva es otra enfermedad muy frecuente de los gatos senior. Los síntomas, además de los vómitos, pueden incluir pérdida de peso a pesar de un aumento de la ingesta de comida y bebida, diarrea, aumento de la micción y vocalizaciones excesivas^.9 Si tu gato senior presenta alguno de estos síntomas, tu veterinario querrá hacerle un análisis de sangre para comprobar sus niveles de hormonas tiroideas. Si tu gato es efectivamente hipertiroideo, tu veterinario hablará contigo sobre la medicación diaria para ayudar a tratar los síntomas de esta enfermedad.

Parásitos

A veces los vómitos, junto con la diarrea en un gatito joven que no ha sido desparasitado rutinariamente, pueden ser un signo de infección parasitaria no controlada^.10 El control de una muestra de heces y la prescripción del desparasitante adecuado pueden corregirlo rápidamente.

Si tienes problemas con un gato que vomita en casa, no te resignes al mito común de que es normal que un gato vomite de forma semirregular. Programa una cita con tu veterinario para que te ayude a llegar al fondo de por qué vomita tu gato y éste (y tus suelos) te lo agradecerán.

Si sospechas que tu mascota está enferma, llama inmediatamente al veterinario. Para cuestiones relacionadas con la salud, consulta siempre a tu veterinario, pues él ha examinado a tu mascota, conoce su historial sanitario y puede hacerte las mejores recomendaciones.